martes, 6 de diciembre de 2016

REFLEXIÓN DE CAS

En esta ocasión aproveche la oportunidad para dar  mi ayuda a  las personas de la tercera edad, gracias a la ayuda de mi institución pude hacerlo en un asilo de ancianos del catón. En un comienzo sentía mucho nerviosismo al estar en frente de ellos, no sabía si les gustarían o no mis acciones, pero eso cambio de inmediato al ver como sus rostros adquirían alegría, para ellos el que los vengan a visitar es muy importantes ya que se sienten abandonados por los demás. Motivada al saber su situación intente desenvolverme con ellos al realizar actividades por medio de las cuales salieran de su rutina y tengan un  momento de diversión, me di cuenta el como esperaban con ansias la próxima visita, haciendo que mis dudas sobre si mi presencia les ayudaba desaparecieran.  Siguiendo con las visitas pude ver que eran unas personas llenas de alegría, que solo necesitaban un impulso para dejarlo salir. Espero que aunque se acabe esta actividad con el tiempo muchas más personas puedan brindar ese cariño que ellos necesitan, y hasta cuando yo tenga esa edad sepa sobreponerme al paso del tiempo y me mantenga alegre  como ellos.